“Y te fuiste..., silbando bajito y en paz...preparando el megáfono y el silbato,,, para hacer correr a todos, allá en el cielo”. Con estas palabras su hija Sabrina despedía a su papá en las redes sociales.
El sábado por la mañana el rumor comenzó a correr, y sus amigos del club, que lo acompañaron siempre, confirmaban la noticia. Luego de una larga lucha contra una enfermedad, Jorge Trevisán fallecía a los 71 años de edad.
En 1975 comienza su actividad en el Jockey Club de Rosario, como preparador físico de los planteles de Hockey de damas y caballeros, lugar que ocupó durante 30 años marcando a varias generaciones de esa disciplina. En 1986 se hace cargo de la preparación física de los planteles juveniles y mayores de la Asociación de Hockey del Litoral.
Dos años después de iniciar su trabajo en el hockey, en 1977 se hace cargo de los planteles superiores de rugby del club, actividad donde también dejaría una huella imborrable a partir de su pasión y profesionalismo. También desarrolló, durante más de una década, un importante trabajo en las divisiones juveniles del club. En 1986 es designado como Coach de la primera división de Rugby del Jockey Club, cargo que honraría durante 12 años. Durante ese período el equipo obtendría varios títulos, entre los que se puede destacar el Nacional de Clubes en 1997.
Su destacada y ascendente carrera lo ubican poco después como preparador físico de la Unión Rosarina de Rugby, y en 1996 es designado en la Unión Argentina de Rugby para preparar físicamente a “Los Pumas” y otros planteles de entidad.
Su vasta carrera en el deporte, no solo abarca el rugby y el hockey, también fue trascendente su trabajo en el tenis. Preparó a Carlos Castellán en sus comienzos en el profesionalismo y también entrenó a Eduardo Bengoechea y Roberto Arguello. En la década del 90´ con Luli Mancini alcanza lo más alto del tenis mundial, cuando el jugador del Jockey Club logra instalarse el top ten del circuito. Su larga lista de tenistas a los que preparó físicamente también incluyen a jugadores como David Nalbandian y Guillermo Coria.
También desarrolló tareas como entrenador en otras disciplinas como golf, yachting, ciclismo y triatlón olímpico. Durante su carrera profesional, brindó innumerables conferencias, seminarios, charlas y tuvo a cargo las Cátedras de Rugby y Preparación Física en distintos instituciones educativas.
“Trevi” fue mucho más que un gran preparador físico, fue el que mejor transmitía la pasión y el esfuerzo. Una gran persona de fuerte convicciones, un apasionado del deporte, cuyo enorme trabajo y amor por el Jockey Club de Rosario quedarán para siempre en el recuerdo de todos.
